Cuando estuve en Ibiza este verano me quedé enamorada de un modelo de collares que se repetía en muchos escaparates. Quedaban tan llamativos sobre el blanco de la ropa adlib que resultaba imposible no volverse a mirarlos.
Como me quedé también con las ganas y con la idea, he intentado hacer mi propia versión con todo lo que he pillado para componer el primero.
Van montados sobre un cordón anudado periódicamente y todos tienen en común un pequeño espejo rematado en varios colores, pompones, borlas, bolas recubiertas, florecillas hechas con cinta de raso, abalorios, cascabeles y un sinfín de variopintos adornos colgando por aquí y por allá.
Así ha quedado mi versión:
Queda aclarado el por qué de bautizarlo "popurrí".
El espejo lo imité recortando una tapa de una lata. Rematado con dos gruesos anillos mágicos de ganchillo, tejidos con un cordón morado que tiene un poco de brillo. Se pone uno por delante y otro por detrás y se unen con aguja, con puntadas flojas todo alrededor. Se teje al final de uno de ellos una cadeneta para hacer el bucle y se remata bien todo. Podéis ver cómo se hace clickando AQUÍ
Alrededor adornamos con lo que se nos ocurra (de entre las miniaturas metálicas que voy guardando escogí una pequeña mariposa, dos cascabeles a los lados y dos bolitas abajo).
Los colgantes están hechos sobre hilo de alambre. Los montamos con abalorios, pompones, bolas de forexpam recubiertas, borlas,...lo importante es lograr una combinación colorida pero que armonice.
Cada modelo ha de ser algo personal.
Y este es uno de los que vi expuestos y me encanó.
Como podéis ver, nada que envidiar...
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Os espero!!
Te ha quedado genial, mucho más bonito que el de la foto, donde va a parar.
ResponderEliminarCualquier día tenemos que montar un mercadillo.