Como había prometido, aquí está el lienzo en el que terminaron los caracolillos que os enseñaba el otro día, transformados en "piruletas" sobre un bolso vaquero...¿a que no os lo esperabáis?
Una vez hemos tejido un buen montón de espirales de crochet sobre trapillo, las podemos unir y hacer cualquier tipo de composición con ellas, igual que con los grannys que se han vuelto a poner de moda, pero esta vez, yo las he transformado en apliques.
El bolso lo hice reciclando la parte de arriba de unos pantalones vaqueros de los que ya había aprovechado hace tiempo los bajos (de elefante) para una falda y la cintura no recuerdo ni para qué.
No he seguido ningún patrón concreto ni soy experta costurera, todo lo hago de modo muy intuitivo y es muy básico como veréis. Pero en la red hay un montón de blogs de costura y de tutoriales con patrones de bolsos que se pueden descargar si los necesitáis.
Partimos de ésto, con las costuras internas ya descosidas, incluidos los picos debajo de la cremallera y por detrás que tendremos que volver a coser una vez estructurado lo que necesitamos.
Juntar por arriba ambos bordes superiores (delatero y espalda, que será como nos quede al cerrar la cremallera) y ajustar bien los picos del fondo de la tela alante y atrás para que quede plana. Sujetamos con alfileres y marcamos desde la cintura hacia abajo por todo el borde la longitud de la medida que queramos que sea nuestro bolso de alto (como veis, es un corte con un poco de forma curvada). El mío mide 34 cm (+1cm para costura). Como me quedaba un pequeño triángulo hueco en medio lo rellené con un trocito de tela .
De los sobrantes corté un rectángulo para la base. Como referencia de medida de lado a lado tomé la misma que el ancho de arriba (de la cintura) para que fuese proporcional (33cm + 2cm para costuras) y de profundidad 12 cm (+2cm para costuras).
Por el revés, lo situé justo en medio y comencé a hilvanar hacia los extremos. Una vez fijada toda la parte recta, lo que sobraba para los laterales, fruncido.
Pasamos la máquina de coser que nos espera.
También a la cremallera que a veces se nos resiste, UF!!
Y ya va tomando forma de saco...guardatodo que posa discretamente pero...¿le falta algo para viajar?.
La correa sale también de unir varios trozos de tela formando una tira larga, que cosí por el revés y después volteé sobre sí misma con ayuda de algo duro como un imperdible (cuesta bastante porque la tela vaquera es dura y se resistía, otra opción sería preparar las costuras vistas desde el derecho para no tener que enredar de esta forma pues me llevó un buen rato). Fijada a ambos lados con 3 costuras de seguridad, éstas las hice a mano porque pillaba la doble costura del vaquero y resultaba difícil con la máquina. Además así os aseguro que quedaron bien fijas-
Ahora sí venía la parte divertida de decidir la colocación de los adornos, combinando "así y asá" hasta que me decidí.
Para ver cómo se hacen los adornos revisar entrada previa clickando en ESPIRALES CROCHET SOBRE TRAPILLO
Para ver cómo se hacen los adornos revisar entrada previa clickando en ESPIRALES CROCHET SOBRE TRAPILLO
Después completé los dibujos con unos palitos a modo de piruletas loly pops. Los hice muy rápido, con la máquina de coser, con un festón tupido. Unos más largos que otros, torcidos para diferentes lados, poniendo también su toque divertido.
Porque poder llenarlo y estrenarlo era lo importante, con unas últimas poses antes de salir de paseo...Que sí, que ya nos vamos!!
Por cierto, los detalles del foulard que lo acompaña también los podéis rescatar de mis inicios con el blog pinchando por AQUÍ
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