Con lo que unos desechan, otros disfrutamos. Un ejemplo más, esta pequeña mesa auxiliar transformada con unos toques de pintura.
Sobre la base, una primera capa de impregnación con gesso, seguida de dos manos de blanco.
Letras en acrílico dorado que podemos improvisar o sacar un molde impreso de los miles que encontramos por la red. Por último, acabado con barniz acrílico.
Y en las patas, dos capas de barniz para madera.
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Os espero!!
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