Continuando con las conchas marinas y aprovechando diferentes formas y tamaños, aunque todas ellas minimalistas en este caso, logré una armoniosa composición con un erizo central.
En este caso me sirvieron para cubrir la tapa de un tarro de cristal. Previamente la había pintado con dos capaz de pintura acrílica azul para ocultar por completo los rótulos que tenía.
Una vez seco el pegamento le di a todo brillo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario